“Construir la empresa que ideas en tu cabeza y verla convertida en una solución que aporta a quienes lo necesitan no tiene precio”

 

1. Parece que, después de unos años de “boom”, el emprendimiento ha dejado de estar en el centro del foco mediático y político. ¿Es un cambio positivo o negativo? ¿Las vocaciones empresariales viven un buen momento?

Es un cambio natural y necesario. El emprendimiento es una opción como otras y no es para todos. Animar a que alguien emprenda sin que lo sienta y esté convencido es como animar a alguien a que haga puenting sin que le apetezca. Puede que la experiencia salga bien o salga desastrosa. Emprender es satisfactorio, intenso, lleno de aprendizajes, de buenas experiencias, pero también es muy duro, a veces frustrante. Por ello, hay que lanzarse si así lo siente uno, no porque sea una moda o no te quede otra salida.
Sobre las vocaciones no creo que sea sencillo generalizar; en todos los momentos hay de todo porque depende de las personas, de sus motivaciones y sus fortalezas o debilidades. Siempre hay personas que tienen clara su vocación y logran darle camino, bien trabajando por cuenta ajena o bien trabajando como empresario o autónomo. Lo que sí tengo claro es que las personas que tienen clara su valía y decisión profesional son aquellas que trabajan con más ganas y, por tanto, logran mejores resultados. No hay nada mejor que ocuparte de aquello que te gusta y sabes hacer bien. La pasión es un valor fundamental hagamos lo que hagamos.

2. Crear una empresa es complicado. ¿Qué debería cambiar para facilitar los nuevos negocios?

Justamente la tarea de facilitar esa creación. Información, trámites, pagos… Es una parte muy compleja que todavía ni se explica bien ni se explica de manera que cualquiera podamos comprenderlo ni se ponen los impuestos y tasas acordes a una idea virgen o muy pequeña que va tomando forma. El café para todos no sirve y actualmente es lo que hay.
Arrancar una empresa requiere tener claros términos y trámites legales, jurídicos, administrativos, económicos, y no todos los emprendedores tenemos por qué saber de todo. Empezar es un momento en el que tampoco tienes pulmón para poder asesorarte previo pago con todas las áreas ni subcontratar todo esto, así que las trabas informativas y económicas son fuertes. En este sentido, el proyecto de Ventanilla Única que defendemos desde AJE Zaragoza y que hemos comenzado a trabajar con el Ayuntamiento de Zaragoza ayudaría a facilitar las cosas.

3. ¿Y para impulsar su continuidad? Las estadísticas del INE muestran que menos de la mitad de las empresas españolas superan los cinco años de vida.

Es muy importante la planificación antes de emprender los negocios. Emprender es difícil, por lo que, desde la figura del emprendedor, hay que tener muy claro el modelo de negocio y, además, tener capacidad de adaptación y de pivotar. No vale pensar algo, validarlo hoy y seguir adelante en el tiempo con esa misma idea sin ir validándola a lo largo del tiempo. Un empresario tiene que estar continuamente validando hipótesis y adaptando el modelo de negocio y, por tanto, la actividad. En este sentido, es importante tener indicadores sobre la planificación estratégica y sobre cómo se despliega y ejecuta ese plan. Para armar todo esto, es esencial la excelencia empresarial como punto de sostenibilidad y que las empresas implanten protocolos. Desde las administraciones deben dar más información y ser más repetitivos con la difusión de la valía e importancia de la excelencia empresarial en las empresas. En este sentido el Instituto Aragonés de Fomento está realizando un gran trabajo y tiene las puertas abiertas para que todas las empresas emprendamos este camino a la excelencia.
Que las empresas tomen pulso, sepan adaptarse y tengan estos protocolos e indicadores aportará más tasa de supervivencia.

4. ¿Cree que existen diferencias significativas entre los empresarios jóvenes y los de mayor edad?

Por supuesto, radica en la experiencia frente a la energía nueva y ambas partes son igualmente importantes y naturales. Un empresario con 40 años de experiencia aporta un poso de sabiduría, conocimientos y batallas que tienen un valor incalculable. Solo con sus vivencias y todo lo que llevan a sus espaldas aportan.
Por el contrario, una persona que lleva 4 años de trayectoria no tiene ese poso, no tiene un bagaje, tienen ciertas habilidades por desarrollar, pero por el contrario trae una energía intacta, ideas frescas, nuevos puntos de vista y una capacidad de trabajo y adaptación muy fuerte.

En AJE Zaragoza los empresarios más consolidados aportan muchísimo. Este último año hemos lanzado la figura de socios impulsores donde empresas con amplia trayectoria se están sumando AJE para dar un apoyo muy importante a los jóvenes empresarios. Pese a esas diferencias a que hacíamos mención nos estamos encontrando con que las personas cercanas a AJE comparten un espíritu y manera de ser muy similar, destacando el ánimo de colaborar y la proactividad.

5. ¿En qué sectores ven desde AJE Zaragoza mayor potencial y dinamismo actualmente?

El dinamismo empresarial y la potencialidad de los negocios puede estar en cualquier sector; no creo en las tendencias que apuntan que, de repente la clave es montar una empresa en el sector X o Y. Absolutamente en todos los tipos de negocios se puede imprimir dinamismo, desde el más tradicional si tienes la capacidad de reinventarte o aportar servicios de manera diferente hasta productos o servicios tecnológicos más modernos, novedosos, desconocidos e innovadores.
Lo que importa es que se encuentren valores diferenciales y añadidos en cualquier sector al que te dediques. Lo que se tiene que pensar es que hay que apostar por diferenciarte de tu competencia, sea a lo que sea a lo que te dediques.

6.- Tiene 10 líneas para convencer a un joven de que se convierta en empresario y cree su propia empresa. ¿Qué le dice?

Haz aquello que te haga levantarte cada mañana con ilusión. Trabaja en lo que sumes y te dejes sumar en un equipo. Como empresaria no trataría de convencer a nadie que no lo sienta de crear su propia empresa. Las personas que sienten ese impulso de dar forma a su pasión profesional a través de su propia empresa, lo saben. Pueden dudar, buscar información y ahí, cuando existe ese miedo inicial que paraliza es cuando desde AJE Zaragoza y desde mi figura, impulso a que sea más fuerte la ilusión que el miedo y que aporten con aquello que les ronda en la cabeza. Construir la empresa que ideas en tu cabeza o en un papel y verla convertida en una solución que aporta a quienes lo necesitan no tiene precio.

7. AJE se acaba de reincorporar a CEOE Zaragoza tras una breve ausencia, ¿qué aporta esta colaboración a ambas organizaciones?

CEOE Zaragoza es, en mi opinión, una de las organizaciones de más peso de la ciudad, tanto por los socios que tiene como por la capacidad de trabajo y la visión. La estructura interna se compone de personas experimentadas que nos dan a los socios muchas ideas, opciones y un fuerte respaldo. Y la asociación en global es una fuente de aprendizaje, formación y colaboración de valor incalculable. Las organizaciones que nos ocupamos de unir a los empresarios, de ayudar a generar sinergias y redes, considero que creamos un papel profesional que tiene una repercusión a largo plazo inmensa.

Concretamente, la colaboración AJE – CEOE es esencial porque se da ese binomio juventud – experiencia que aporta unas visiones y perspectivas complementarias y de equipo.

8. ¿Qué considera que supone para la empresa y la sociedad el asociacionismo empresarial? ¿Por qué aconsejaría a un empresario joven o maduro pertenecer a una organización como AJE o CEOE?

Todo lo que suponga unirse para crecer y aportar es tremendamente positivo y ese es el significado tanto de CEOE como de AJE. A través de nuestras iniciativas, programas, de la red de contactos que creamos y de las colaboraciones, el objetivo que trabajamos es el de aportar crecimiento económico, de empleo, cultural e impulso a la vida social de la ciudad. Directamente nos beneficiamos los empresarios socios, indirectamente se beneficia toda la ciudad. Agitamos la vida social, empresarial, los perfiles profesionales. Es casi imposible poder enumerar todos los beneficios que ello conlleva.

9. ¿Qué programas y actividades son más relevantes entre los que tiene ahora mismo en marcha AJE Zaragoza?

MentorizAJE es uno de nuestros programas estrella, que organizamos de la mano de INAEM, justamente por la unión que generamos entre personas que quieren aprender y personas que quieren enseñar. Ambas partes vienen de negocios, sectores y trayectorias distintas y se unen para mejorar. Lo mejor de todo es que el objetivo inicial era dar impulso a jóvenes empresarios que demandaban un impulso de conocimiento, experiencia, ideas, orientación… Y resulta que los tutores que mentorizan proyectos terminan la experiencia resaltando que ayudar les hace pensar y, por tanto, mejorar a ellos también, contagiarse de ilusiones, tener nuevas preguntas en su cabeza. Se genera trabajo y se genera comunidad, que es precioso.
Además tenemos los foros de formación que periódicamente aportamos para ofrecer formaciones 100% prácticas y orientadas a la aplicación de nuestras empresas.

Estamos trabajando en un conjunto de actividades de la mano de Ibercaja Banco y Fundación Ibercaja para dar más valor añadido a los jóvenes tales como el “ADN emprendedor” donde distintos jóvenes empresarios ilustran con sus experiencias el espíritu emprendedor o diferentes formaciones que vamos a llevar a cabo en materias como planes de pensiones y financiación.
Y finalmente tenemos una línea de actividades como el Premio Joven Empresario, nuestras cenas y actividades de Networking que están orientadas a hacer familia, a conocernos mejor y aplaudir nuestras trayectorias. A saber que aunque somos en ocasiones competencia, antes de nada somos personas que podemos ayudarnos, aportarnos y darnos cariño. No nos olvidemos que somos empresarios y somos sociedad y la educación, el respeto y el cariño son los peldaños fundamentales para triunfar en lo económico.

10. Como presidenta AJE, ¿cuál es tu objetivo en la asociación y en la relación con otras asociaciones como CEOE?

Cuando comencé, anuncié que trabajaría bajo el lema Unidos Logramos Más. Y esa es la máxima que practico en mi día a día. Me gusta generar unión entre los asociados y con los distintos entes de la ciudad. Creo que es el mayor papel que puede jugar un buen líder: generar unión y comunidad.

¿Cómo se da forma a eso? Mis ingredientes son la ilusión y la responsabilidad. Ser un empresario fuerte, tener diferentes cuestiones de responsabilidad…no impide que no tengas ilusión por las cosas, que la sientas y más importante la contagies, y eso es lo que me gusta aportar. Además, el mundo empresarial y de relaciones incluye altas dosis de responsabilidad con todo: con los trabajos, con los objetivos, con las situaciones de cada uno… Trabajar con buenas energías es necesario y es posible y eso es por lo que me gustaría que se me recordase como presidenta.