«Si queremos descarbonizar, el reto está en el calor, no en la electricidad»

 

¿Cuál es la historia detrás del nombre de Abora?

Abora surge a partir de una idea, que es mi tesis doctoral. Decidí ser ingeniero industrial aquí, en la Universidad de Zaragoza. Tuve una idea de desarrollo de una nueva tecnología solar porque hay un problema y es que la tecnología solar no es suficientemente rentable. Entonces, desarrollé el panel solar híbrido que busca ser el más rentable a nivel mundial. Abora surge como la solución a poner esa tecnología en el mercado. Y por qué el nombre: Abora significa sol en guanche, una lengua de las Islas Canarias. Nos pareció un nombre que estaba muy alineado con los principios de la empresa.


¿Cuál es la visión de la empresa?

Abora pretende cambiar el modelo de la energía solar. Hasta ahora vemos paneles fotovoltaicos, megahuertas, pero donde tenemos que generar es en nuestros edificios y hacerlo con tecnología que sea rentable. Eso es Abora y nuestro objetivo es siempre tener la tecnología solar más rentable del mercado, porque sostenible siempre será.


¿Qué es un panel solar híbrido y en qué se diferencia de otras tecnologías?

Normalmente, de la industria solar se conoce la fotovoltaica que produce electricidad y la solar térmica que calienta agua. El híbrido es simplemente la combinación de ambas. Es decir, un panel que genera electricidad y agua caliente. ¿Por qué es interesante este panel? Porque en las ciudades principalmente consumimos calor. De toda la energía que consumimos, solo un 20% es electricidad, el 30% es transporte y el 50% es calor. Por lo tanto, tenemos no solo que atender al 20%, sino también a esa demanda de calor: agua caliente sanitaria, de las piscinas, de un hotel, de un hospital, de una residencia de ancianos. Mayoritariamente, si queremos descarbonizar, el reto está en el calor no en la electricidad.

¿Cuáles son las ventajas de elegir vuestro panel para el cliente?

El gran reto que tenemos en las ciudades y en nuestros edificios es que no tenemos cubierta suficiente como para generar toda la energía que consumimos. Entonces necesitamos tecnologías que generen lo máximo posible. Si tengo un edificio y quiero poner fotovoltaica solo voy a aprovechar el 20% del sol que nos llega. Sin embargo, con un híbrido voy a aprovechar el 89%. Es decir, mi negocio puede reducir los costes energéticos y ser más competitivo. Como industria tengo tres costes cada mes: energía, salarios y materia prima. ¿De dónde recortamos? Es estratégico hacerlo de la energía.


¿Fabricar en Zaragoza es un compromiso con Aragón?

Es nuestro ADN; la tecnología se ha desarrollado aquí y se fabrica aquí. Y su futuro pasa por quedarse aquí. Pero la clave para hacerlo es seguir innovando en nuestro Aboratorio, que es donde seguimos desarrollando los productos del futuro. La garantía para poder quedarnos es fabricar cosas diferentes, innovar y eso es el ADN de Abora.


¿Qué nos reserva Abora en 2024 y a futuro?

Acabamos de terminar un primer ciclo de consolidación de empresa. Ahora empieza el siguiente ciclo a 5 años. Por tanto, 2024 es estratégico para nosotros y lo vamos a enfocar en tres líneas. A nivel tecnológico, desarrollando los siguientes paneles porque estamos innovando; tenemos el panel con más eficiencia del mercado, pero antes o después nos copiarán. Por lo tanto, tenemos que ir evolucionando. A nivel de internacionalización estamos ya en 35 países, pero aún hay que consolidar esos mercados. Y a nivel de conocimiento de marca, tras 5 años, es el momento de que la gente conozca Abora y cree esa confianza en una nueva marca que genera ahorros ahora y en los próximos 25 años.